Buenos Aires.- El ministro de Economía, Sergio Massa anunció junto a presidentes de algunos bancos el aumento de los disponibles para la compra con tarjeta de crédito para mejorar el acceso al programa Ahora 12 y compras en cuotas en general. Sin embargo, del anuncio participaron representantes de los bancos públicos y de los privados de capital nacional solamente, pero no estuvo ABA, la asociación que nuclea a los bancos de capital extranjero, lo que hace presumir que en principo esas entidades no adherirán a la medida impulsada por el Gobierno.


Explicaron en el Ministerio que los cambios significarán un aumento del crédito disponible para familias y para empresas: estimaron las fuentes consultadas que más de 20 millones de argentinos podrán comprar hasta 30% más con sus plásticos (hay más de 39 millones de tarjetas emitidas por las entidades que están vigentes).
Pusieron como ejemplo que por cada $10.000 pesos de disponible en un pago, se suman $ 3.000 más, de manera que si el límite de compra de una tarjeta era de $ 50.000, ahora será de $ 65.000 pesos.
El ministro hizo hincapié en que con este incremento las familias van a poder acceder a más bienes con el Plan Ahora 12, ya que la intención -explícita- del Gobierno en las vísperas de las definiciones pre electorales es mostrar algún incentivo para el consumo, por módico que sea. Aunque de todos modos los detalles de la operatoria serán difundidos a sus clientes por cada banco emisor, de acuerdo con lo estipulado en la reunión de Massa con los banqueros.
En concreto, según el anuncio ministerial, la medida permitirá 30% más de margen para compras en cuotas con tarjetas de crédito; además, 25% de aumento en los márgenes a un pago; y también 25% más en los márgenes de adelanto en cuenta corriente a MiPymes.
Por la crisis y la contínua devaluación de los ingresos, las familias optaron por endeudarse cada vez menos con compras a crédito, y paralelamente bancos y tarjetas fueron restringiendo los límites de compra de los plásticos para ponerse a cubierto de la morosidad. La combinación de esos factores explica que la carga total de este tipo de deuda sea acotada hoy entre las familias argentinas, ya que representaba apenas 10,4% de la masa salarial en noviembre de 2022 (último dato disponible) y seguramente ahora sea más baja todavía.
Los sectores de menores ingresos -titulares de tarjetas de crédito con menos márgen de compra- son los que saldan sus gastos con mayor irregularidad y acumulan la mayor parte de la deuda total del sistema, mientras que los de ingresos medios/altos y altos casi que no registran morosidad.
En los últimos 12 meses, las cinco jurisdicciones con mayor participación en la cantidad de personas deudoras con tarjetas de crédito fueron Buenos Aires, CABA, Córdoba, Santa Fe y Mendoza, que totalizan casi 77% del crédito del sistema financiero instrumentado mediante tarjetas. De esas Top 5, Mendoza y la provincia de Buenos Aires lideran el ranking de aumento de la morosidad con tarjetas de crédito en ese lapso.
Pero también en Catamarca, La Rioja y Misiones, entre las provincias con menor cantidad de tarjetas de crédito por habitante, aumentó fuertemente la morosidad en el último año, según los datos oficiales disponibles a fines de 2022. El ministro también prometió a los directivos de bancos que va a «seguir trabajando» en la «búsqueda de soluciones» para aquellos que están comprometidos en la capacidad de pago, como así también en los días de cobranza de los pagos con tarjeta.
Luego agradeció el compromiso al que arribaron: «Valoramos enormemente la decisión de los bancos públicos y privados de capital nacional, que toman la decisión de ayudar a consolidar el consumo a partir de aumentar el cupo de tasa, el cupo de endeudamiento de crédito para los beneficiarios de tarjeta de crédito, a partir de aumentar el cupo de crédito en el primer pago, de aumentar la capacidad de financiarse en cuenta corriente con el caso de las Pymes o las MiPymes, que todos sabemos que todos los días corren al banco», destacó Massa.
Fuentes del Palacio de Hacienda -citadas por Infobae.com– afirmaron que a partir de la próxima semana, “el costo de financiamiento en 12 cuotas se reducirá en un 9%”, de forma tal que la tasa de interés del 81,75% se reducirá al 72,75% anual, muy por debajo de la inflación ya estacionada por encima del umbral del 100%.
«Entendemos que es bueno que el regulador y los bancos públicos y privados nacionales de capital nacional tomen esta iniciativa, la sostengan y nos permitan en los próximos meses que se vean beneficiados los consumidores, no sólo en la compra de la hora 12, sino en la compra con tarjeta, en un pago o en cuotas», agregó.
Estuvo acompañado por la plana mayor del Ministerio y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, en tanto que en representación de las cámaras bancarias participaron la presidente de Abappra (los bancos de capital estatal) y Banco Nación, Silvina Batakis y buena parte de sus directorios. Por ADEBA (los bancos privados de capital nacional) estuvieron también los principales integrantes del directorio que encabeza Javier Bolzico.
No participaron los bancos de capital extranjero nucleados en ABA, que son los que facturan mayor volúmen de compras con tarjetas de crédito.