Buenos Aires.- El G7 (Alemania, Canadá, Francia, Italua, Japón, EE.UU. y el Reino Unido) emitió una declaración conjunta en la que manifestaron su preocupación por el accionar de China ante la visita a Taiwán de la presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi. El comunicado que lleva la firma también del jefe de diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell sostiene la necesidad de mantener un orden «basado en reglas».

El ministro de Exteriores taiwanés, Joseph Wu con la presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi. Teipéi, Taiwán, 3 de agosto de 2022. (RT)

Pero desde Pekín emitieron un descargo publicado en el periódicoo de Global Times en el que desconocen que haya un artículo «de este tipo en el propósito de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), sino solo dos disposiciones claras obre la inviolabilidad de la soberanía nacional y la integridad territorial». E insistieron en que se trata de una provocación, la visita de la representante estadounidense, por la que días antes de su llegada a Teipei salieron representantes chinos a aclarar que lo tomaban como una clara amenaza.

Por su parte, el coordinador de Comunicaciones Estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby declaró que Washington «no quiere una crisis» en la región, pero que está «preparado para manejar» la sitaución. Señaló que «no participaremos en ruidos de sables. Seguiremos operando en los mares y cielos del Pacífico occidental, como lo hemos hecho durante décadas. Continuaremos apoyando a Taiwán, defendiendo un Indo-Pacífico libre y abierto, y buscaremos mantener la comunicación China».

En la declaración conjunta indicaron que las maniobras militares y al presión económica, pueden conducir a «una escalada innecesaria» y sostuvieron que «no hay razón para usar la visita (de Pelosi) como pretexto para una acción militar agresiga en el estrecho de Taiwán». Instaron a «no cambiar unilateralmente el ‘statu quo’ en la región por la fuerza» y a resolver las diferencias por medios pacíficos.

Previo a eso, el Ejército chino comenzó este 4 de agosto maniobras militares con fuego real alrededor de Taiwán, ejercicios que equivaldrían a un ‘bloque marítico y aéreo’ de la isla según el Ministario de Defensa taiwanés. Según medios de Taipei, éstas acciones han afectado a 18 rutas aéreas internacionales de la isla y más de 900 vuelos se vieron obligados a modificar sus rutas.

Los ejercicios incluyeron disparos de municipión real de largo alcance hacia el estrecho y un despliegue naval alrededor de la isla que continuará hasta el domingo. Desde Taiwán afirmaron que se monitorea de cerca a los ensayos y que «el ministerio de Defensa Nacional sostiene que mantendrá el pricpio de prepararse para la guerra sin buscar la guerra, con la actitud de no escalar el conflicto ni causar disputas».